12 de junio de 2007

El apartamento IV

El final del verano llegó, y tu partirás, yo no se hasta cuando…hasta nunca, nunca jamás volverás a alquilar un apartamento en la playa. Como experiencia ha sido única y será irrepetible.

Tras hacer números, te das cuenta de que con lo que te has gastado entre el alquiler, las noches que has cenado fuera, caprichos varios, un par de manteles decentes y cinco o seis barras de aután para no servir de alimento a los mosquitos, te podías haber ido a tutipleni por lo menos diez días de viaje, a un buen hotel en el centro de alguna bonita ciudad, de esas en las que aunque sea verano, por la noche hace fresco. Te hubieras empapado de cultura, descubriendo lugares que no conocías y disfrutando de la gastronomía propia de la zona. Y por último y no por ello menos importante, hubieras estado a piquito-rollo, sin tener que fregar un plato ni hacer una cama. ¡Eso es vida!

Así que cuando cierras la puerta del apartamento un lagrimón rueda por tu mejilla. –Mamá, ¿Por qué lloras? ¿Tu también estás triste porque el verano se acaba?-.-No cariño, es que de alegría también se llora-.

Mi casa…mi colchón…mi aire acondicionado…mi…mi…mi…

Hasta la próxima, o no.

PD: Puesto que nunca he alquilado un apartamento en la playa, nada de lo aquí escrito es fruto de la experiencia, solo de mi imaginación. No creo que la experiencia sea tan horrible, o quizá si, o incluso puede ser peor.

9 comentarios:

  1. La verdad es que está bastante real (yo tampoco he alquilado nunca pero vamos, es fácil saberlo nada más que de visita en una casa de alquiler de verano). El mejor verano, en la ciudad.
    Por cierto, ironías de la world wide web: Tú poniendo a caldo a los apartamentos de alquiler y Google, en su ingenuidad, poniendo estos anuncios: Apartamento Alquiler Costa Chalet Verano Casa Playa
    Besos

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  2. Yo sí he alquilado, como te dije, apartamentos en la playa, aunque en general como mis padres tenían casa en la playa, allá que me iba en algunas ocasiones. Lo mío, desde luego, son los hoteles. Y ya estoy deseando que llegue agosto, porque me está esperando Dinamarca y el sur de Suecia. Y espero pasarlo en Conpenhague igual de bien que lo pasé en Estocolmo, ciudad de la que me enamoré perdidamente y a la que pienso volver un año de estos, si todo va bien.

    Un beso.

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  3. Afortunadamente, no has alquilado un apartamento en la playa.
    Yo una vez, verano pasado y en Ibiza y todo fue genial.
    pero debe de ser tan real como la vida misma lo que tan bien cuentas.

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  4. Ya sabia yo que no era experiencia,jeje, ese capitulo de Cuentame también lo vi yo. No en serio, yo tb. me lo imagino asi, pero creo que todo es mejorable

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  5. Edu, sin duda lo mejor la ciudad, además de que tu y yo somos muy urbanitas.

    Mª Carmen, eso si son unas vacaciones, disfrútalas, que envidia me das...envidia sana.

    Enrique, la playa y yo no nos gustamos, y además tengo un grave problema, no soporto la arena.

    Cris, ja ja ja, eso me lo he imaginado después de alguna que otra "interesante" conversación de parque.

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  6. Pues... para no haberlo alquilado nunca, ha resultado de una exactitud increíble.

    Saludos.

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  7. dicen que segundas partes nunca fueron buenas, y las terceras y las cuartas menos; pero tu eres la excepción que confirma la regla.

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  8. Landahlauts, escuchando experiencias ajenas y luego "leyendo" entre lineas, te das cuenta de que la mayoría de las veces no todas las estupendas vacaciones que te cuentan son tan estupendas.

    Edu gracias, pelota.

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  9. Clavadico a la realidad; una vez alquilé, con los crios aún pequeños y, de quince dias, me sobraron todos. Uff, qué ajetreo, que follón, y, qué calor. Nunca entenderé estos trajines tampoco yo. Saludos. Genial, me ha encantado

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Pues vosotros diréis...